SOBRE POLÍTICA EXTERIOR por Antonella Cassina

La Política Exterior refleja el interés nacional de la Argentina. Refleja debido a que si no se establece cuál es el interés nacional va a ser muy difícil llevar a cabo una Política Exterior acorde a lo que Argentina realmente quiere. Sin embargo, establecer cuál es el interés nacional es complejo. Es una noción teórica que cambia según el tiempo y lugar. Su enfoque varía dependiendo de quién y desde dónde esté opina. Establecer cuáles son estos intereses debería ser una tarea de todos no solo del gobierno de turno. Debe coincidir con la identidad colectiva, una identidad que incluye a todos los sectores de la sociedad, por encima de banderías o posiciones partidarias, ya que de coincidir en lo esencial y de estar animados por un mismo espíritu, mediante políticas de Estado quedará asegurada la continuidad en la protección de dichos intereses que serán siempre respetados cuando se produzca la alternancia en el poder.

Pero, ¿qué ocurre cuando esa política de Estado se encuentra eclipsada por los gobiernos de turno? Como menciona Hunt, las políticas de Estado no sobreviven debido a que son cambiadas por otras totalmente distintas. Tenemos políticas atadas a las ideologías y preferencias de los del gobierno de turno.

Vivimos en una Argentina de desencuentro, donde es blanco o negro, donde si estás parado en la vereda de enfrente todo lo que pensas esta mal. La sociedad se encuentra fragmentada. Seria una utopia pensar a la sociedad como una masa políticamente homogénea. El problema no reside en nuestras diferencias, sino en creer que estas nos hacen rivales y que las políticas realizadas por los “otros” están mal. Las decisiones en nuestra querida Argentina no están basadas, como menciona la Constitución Nacional, en el bienestar general. Más bien en creer que la verdad suprema se encuentra en mi ideología o partido. Subordinar los intereses a ventajas oportunistas perjudica la imagen del país y, por ende, la Política Exterior como política de Estado.

Si bien es una tarea difícil la de definir el interés nacional y, por ende, la política exterior, no es imposible. Como argumenta el embajador ambos conceptos deben ser definidos por la sociedad en su conjunto y debemos entender que a pesar de estar en la vereda de enfrente la Política Exterior nos representa a todos.

Antonella Cassina